Crisis

La crisis con rostro humano. Desde Movimiento Crítico queremos reflexionar sobre los daños que están provocando las reformas del capitalismo para salir de su crisis. Las consecuencias son una estafa y un genocidio dirigido contra las clases trabajadoras y, en general, los pobres.

Los pobres seguimos legitimando este sistema, respondiendo afirmativamente a las organizaciones de este sistema, y por ello tenemos una responsabilidad compartida del drama que viven día a día personas como Paquita.

¿Qué debemos hacer? ¿Organizar una formación política y arrebatarles el Parlamento y el Gobierno a esos caciques del capitalismo? ¿Rechazar al Estado y acabar por la fuerza con toda opresión? Os animamos al debate. Dadnos vuestra opinión, por favor, y no os remitáis a la impersonalidad de la máquina (ese simplista "me gusta"). Necesitamos hacernos oír.

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Spanair

¿Cuánto vale una vida humana? Más que una pregunta, es un problema ontológico. Problema que en el capitalismo se responde siempre con dinero. Spanair la cifra entre 73.000 y 82.000 euros, al ofrecer 12,7 millones de euros a las 172 víctimas (154 muertos y 18 heridos) que dejó el accidente de 2008.

Tras una negligencia por parte de la compañía, esta responde a base de talonario y amenaza, utilizando el baremo de indemnización establecido para accidentes de tráfico y mencionando muy sutilmente las nuevas tasas judiciales en caso de que no les parezca suficiente la indemnización a las familias de las víctimas.

No nos engañemos: esta es la faz del capitalismo. Todo vale para encontrar el máximo beneficio personal, incluso la muerte.

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The Great spanish Crash

La BBC nos brinda otro notable documental, esta vez, sobre el estado de España

en el marco de la actual crisis económica. BBC no puede desmarcarse del Capital y ofrecer unas conclusiones anticapitalistas, pero nosotros sí; precisamente la información que este documental nos brinda, nos es precioso.

En primer lugar, aconsejaría visionar previamente los documentales "Inside Job" y "La doctrina del shock" para introducirnos en el contexto: un sistema capitalista que, para sobrevivir, creó al monstruo del neoliberalismo (una doctrina que se apoya en una política de choques políticos, económicos y sociales para trasvasar la riqueza de abajo -pobres- a arriba -ricos-, valiéndose de las herramientas que el Capital les ofrece); por otro lado, ¿cómo se gestó la crisis actual que estalló en 2008? Abusando del marco financiero hasta generar una nueva crisis que ha afectado a todos los ámbitos de la economía, generando la mayor de todas las estafas de la Historia.

El documental de la BBC que presentamos ("The great Spanish crash") rememora todos los pasos que hemos dado en España para adentrarnos en ese contexto, con nuestros propios problemas estructurales, combinando ambas situaciones y dejándonos en esta situación de riesgo, que se torna en una situación límite para millones de españoles (21% en riesgo de pobreza, 25% de paro, aumento de la tasa de suicidios...).

Sin embargo, la BBC no analiza que el origen de todo el problema es el capitalismo. Es el capitalismo el origen en tanto que todos los elementos analizados de corrupción y de incompetencia han sido planeados o bien aprovechados por la oligarquía burguesa dueña de los medios de producción (esto es, de los elementos que generan la riqueza): BBVA, Santander, Inditex, ACS, y un largo etcétera de tiburones de alto vuelo que han aumentado sus ganancias al tiempo que se ha empobrecido la población española.

¿Cómo si no es posible que mientras que la población española ha sido condenada al desempleo, al desahucio, a la miseria y al suicidio, las grandes fortunas del país han aumentado en un 8,4% su fortuna? A esto se añade que el sistema capitalista, cuya herramienta política es la democracia representativa, permite y alienta a que estas fortunas evadan sus impuestos. En España, estas grandes fortunas y grandes empresas producen el 72% de la evasión fiscal (unos 80.000 millones de euros al año), provocando la no contribución al Estado, y haciendo que todo el peso de la crisis recaiga sobre la ciudadanía, más bien, sobre la clase trabajadora.

¿Qué hace el Estado para evitarlo? Elabora una amnistía fiscal para que estas grandes fortunas paguen solo un 10% de lo que deberían haber pagado, al tiempo que se les perdona todas las penas. Ni que decir que es una medida inútil, porque no les genera beneficio (y esa es la base del capitalismo), y se ha demostrado como tal (ha recaudado un 2% de lo esperado: 150 millones).

La crisis que vivimos es una crisis a todos los niveles, es una crisis que genera propiamente el capitalismo y es una crisis que tiene una solución política, que puede ser construida por todos los ciudadanos, en la calle o en las urnas, como prefieran. Desde luego, solo en las urnas es imposible. ¿Vamos a empezar a tomar las riendas de nuestras vidas, o vamos a seguir dejando que el Estado y el Capital nos oprima y nos condene hasta que muramos por el peso de sus injusticias?

Grecia

La situación en Grecia es caótica, sí. El año pasado se sucedieron huelgas salvajes, de incluso 72 horas. Las condiciones de un amplio ratio de la población es límite, hasta el punto de que la tasa de suicidios se ha convertido en solo tres años de la más baja a la más alta de la Unión Europea.

Me impactó ver cómo el año pasado había enfrentamientos directos

entre comunistas y anarquistas. Estos últimos llegaron a ocupar el Ministerio de Economía durante una semana. En este año han ocurrido dos cosas: la articulación social en torno a SYRIZA y el auge del populismo neonazi de Amanecer Dorado.

Las presiones fácticas y mediáticas sobre el electorado griego impidió a SYRIZA vencer en las elecciones. ND formó gobierno con PASOK (los equivalentes a PP y PSOE en España) para ponerse al servicio de la troika y seguir completando los paquetes de recortes y privatizaciones que están llevando al país heleno al caos total.

Ese caos ha permitido el auge de Amanecer Dorado (XA), que consiguió en ambas elecciones (mayo-junio) un 7% de los votos. Actualmente las encuestas los posicionan en un 14%, mientras SYRIZA (30,5%) crece tímidamente por encima de ND (27%).

Mientras, el gobierno de ND-PASOK piensa en privatizar las líneas de costa e incluso en vender los ministerios. Más claro que el agua: el Estado se disuelve en el caos social. En las calles, las patrullas antifascistas se enfrentan a los neonazis, quienes están respaldados por un sector de la sociedad y reciben apoyo policial.

A quien no le interesa la política (relegando todas las decisiones importantes de la vida cotidiana al banquillo) suele manifestar que "todos los extremos son malos", haciendo referencia al comunismo-anarquismo por un lado y al fascismo por otro, ignorando por completo el funcionamiento de dichas ideologías. Mientras que unos defienden a todas las personas (el lema "ningún ser humano es ilegal" es representativo, y llama la atención cómo las patrullas antifascistas son recibidas con aplausos entre los inmigrantes y los barrios obreros) y buscan una alternativa social y económica al capitalismo, otros pretenden ahondar las relaciones capitalistas culpando a determinados sectores de la sociedad de las crisis estructurales del sistema.

¿Todos son igual de malos? Hay que empezar a plantearse algunas cosas. Pese a los que nos han repetido una y otra vez, los problemas que se están dando en Grecia pueden darse en España. Grecia ha sido el laboratorio de la troika, y por tanto medirán sus actos en España, pero la miseria que generan las medidas que nos imponen desde Europa, el problema latente del fascismo, y la pérdida de derechos siguen siendo puntos activos en la política española.

Esto no se va a solucionar solo con votos, o con manifestaciones. Hay que empezar a tirar fuerte del Estado para rechazar contundentemente las medidas que quieren imponernos. No somos esclavos. Como hombres libres hay que plantearse la defensa de nuestros derechos y de nuestras libertades, y en consecuencia, combatir el fascismo y el capitalismo, pues es el único problema que tenemos ahora.

Víctor Peña

Grito sin voz

Ya ni siquiera grito, antes lo hacía pero nadie me escuchaba. Ya solo puedo llorar, quieta, mientras lo siento encima de mí. Lloro, me ahogo y no puedo hacer nada más, solo arrepentirme. Arrepentirme quizás de no haberlo visto antes, de no haber podido evitarlo.

Quiero gritar. Necesito gritar y no puedo. Me ahogo… Está encima de mí, lo siento cómo gime, cómo balbucea, lo veo cómo sonríe, siento cómo su cuerpo, sus manos, ¡todo se adentra en mí! Y no puedo evitarlo. Miro al techo y lloro, quiero que todo pase, que todo termine, que nunca antes hubiera pasado nada de esto.

Cómo no pude verlo antes… No lo vi, él siempre fue un amigo, un amigo con el que contar. No puedo creer que me esté haciendo esto, pero no es él, no es esa persona. Sigue pegándome, no sé por qué. Yo no me muevo, no grito, solo intento desaparecer. Me obliga a que le mire, eso le gusta. Quiere ver cómo me retuerzo de dolor ¡Me está matando!

Ya está. Todo terminó. Lo he sentido cómo estallaba dentro de mí, y yo no he podido evitarlo, solo intentar mirar a otra parte, por no vomitar, por no sentirme más humillada de lo que me siento. Y me duele. ¡Dios, cómo me duele! No había sentido el dolor. No ese dolor, sino el de mi orgullo, no puedo más. Ni siquiera sé qué parte me ha dolido más, quizás los golpes del principio, ¿cuando me tiró en la cama me golpeó? Sí, lo hizo, creo que por eso hay sangre en mi cara.

Se acaba de levantar, no quiero mirarlo. Tiene sangre y sé que es mía. Tengo tanto miedo. Intento taparme, no sé muy bien por qué, pero necesito hacerlo. Mi ropa está rota, rajada, manchada, manchada de mí, de él. Siento tanto asco.

No quiero mirarlo, lo siento a mi lado vistiéndose, preciso, con movimientos limpios, como si no acabara de hacer nada más que levantarse de una siesta. Y yo lo único que puedo hacer es llorar, como lloran los niños pequeños, con ese llanto y esa congoja. De nada me sirvió gritar al principio, ni ahora, ya todo me da igual. Solo quiero que se vaya, poder limpiarme todo lo que me corre ahora entre las piernas, quitarme de esta cama mojada, que ya no es mía, le tengo casi tanto asco como a mí misma.

 ¡Vete!- es lo único que puedo articular ahora, me duele todo demasiado, estoy demasiado cansada, no puedo decir nada más. Pero se ríe, me mira y se ríe.             ¡Vete! ¡Vete!- pero le da igual, sigue riéndose. Ya no puedo más, mi coraje, mi odio, se mezclan con la humillación que siento, y no puedo.

Es curioso, ya no me importa nada, pero aun así me estremezo. Vuelve hacia mí, y tengo tanto miedo… Me tira de los pelos y me dice algo. Sí, que no diga nada, que me matará. Me está amenazando y me hace daño, me duele. Ya no me quedan lágrimas, no tengo fuerzas para llorar. Ya no.

De repente no lo siento, creo que se ha ido, siento cómo los pasos se alejan y el ruido de la puerta al cerrarse. Me quedo quieta e inmóvil, muda, sin articular palabra, mirando al vacío y viendo siempre lo mismo: su cara, su risa, sintiendo su sudor, sus golpes para silenciar mis gritos, viéndome quieta e impotente mientras le siento restregarse sobre mi cuerpo, viendo cómo me aprieta, cómo me toca… ¡Me duele todo tanto! Pero mis lágrimas se secaron, mis ojos se agrietaron y ya por fin dejé de temblar. ¿Qué hago? ¿Qué hago ahora? Necesito que alguien me abrace, que me diga que todo va a salir bien, que me cure. Pero ahora todos me dan miedo. Él era mi amigo. Y no puedo, no sería capaz de soportar sus miradas de lástima, de compasión, me da vergüenza, no puedo hacerlo. Denunciar, sé que tengo que hacerlo, pero…  tengo mucho miedo, y, por qué no decirlo, ¡vergüenza! No lo soporto. Solo quiero olvidar, todo tiene que pasar. Sí, todo pasará, no pensaré en ello, no lo recordaré, lo borraré de mi mente, lo eliminaré. Si no lo hago no lo voy a poder soportar, lo sé.

Me levantaré, quitaré y lavaré las sabanas, me limpiaré toda la sangre y todo el esperma que hay en mí, me curaré las heridas y abriré las ventanas para que entre aire nuevo, para que desaparezca este olor, este aire viciado y pesado cargado de gritos, de angustia, de vergüenza. Después quizás me tire en el sofá hasta que llegue alguien. Sí, eso haré. Seguro que el tiempo pasará, que todo quedará, lo olvidaré, lo sé, me obligaré a hacerlo y seré feliz, a pesar de todo.

"La esperanza de la impunidad es para muchos hombres

una invitación al delito."

Villaume, Pierre

Ana García

Mis razones para ir a la Huelga

Tengo 22 años, y durante estos 22 años he hecho todo lo que mis padres, mis profesores y los Gobiernos me dijeron que era bueno hacer. He cursado estudios superiores y no he cotizado ni un mes de trabajo en una región donde existe un 36% de paro y más de un 50% de paro juvenil.

Tal vez fui demasiado tonto y no aproveché la oportunidad que el boom inmobiliario dio

 a muchos jóvenes. Tal vez no debería haber seguido estudiando, y debiera haberme buscado un trabajo seguro que me procurase algo de estabilidad económica. Tal vez, si hubiese hecho todo eso, ahora estaría condenado a pagar una deuda impagable, desahuciado y embargado, sin estudios, sin trabajo y sin posibilidades de prosperar.

Pero lo cierto es que, con más pena que gloria, me encuentro acabando mis estudios universitarios, sin atisbar una salida laboral, sabiendo que la vía educativa (por la cual tengo que pagar 1800 euros para poder hacer cualquier oposición) está cerrada, sabiendo que lejos de crearse empleo, como prometió este Gobierno, se está destruyendo como nunca antes se había hecho. La única salida que vemos muchos jóvenes es hacer las maletas y buscar un futuro incierto en otro país más agradecido, lejos de todo lo que valoro y he conocido.

Pues bien, no me da la gana. No me da la gana de tener que seguir pagando cada año más y más por un derecho fundamental que es la educación. No me da la gana que se violen todos los tratados aprobados por el pueblo español. No me da la gana que me mientan diciendo que no hay dinero, dejando naufragar a un sinfín de familias arruinadas al tiempo que los ruinosos bancos son rescatados con el dinero que sale de nuestro sacrificio.

No me da la gana que el IVA suba al 21%, quebrando las esperanzas y posibilidades de los pequeños comercios, que son los que más empleo generan. No me da la gana que un funcionario cobre la mitad de su sueldo, o hasta un 80% menos solo por estar enfermo. No me da la gana que se recorten los derechos que se consiguieron después de tantas luchas sociales. No me da la gana volver al siglo XIX.

No acepto los recortes en educación, en sanidad, ni en democracia. No acepto el capitalismo, por su manera de enemistar y esclavizar a la humanidad. No acepto que no se vaya a una huelga porque se crea que no sirve para nada. No acepto el individualismo insolidario que pregona esta sociedad. No acepto tampoco que se esgriman excusas para no confluir con tus conciudadanos en la "búsqueda de la felicidad".

Aquellos que ocasionaron esta "crisis", los ricos -quienes han estafado y traficado con todo lo posible y lo imposible-, son quienes nos culpan, bajo el nombre de "los mercados" y a través de los Gobiernos, de la situación que ellos han provocado. Nos hacen culpables no por nuestros crímenes, sino por nuestra apatía, es decir, porque les dejamos.

Ahora es nuestro momento. El 14 de Noviembre podemos alzar la voz en nombre de la clase trabajadora de Grecia, Portugal y España. La huelga es una herramienta, un instrumento de trabajo para crear el bienestar de los pueblos contra la opresión del capital. Debemos emplearla, y hacerlo eficazmente. Unamos fuerzas y paremos el país para que entiendan que NO SOMOS SUS ESCLAVOS, y vamos a luchar.

Víctor Peña González,

Movimiento Crítico

POR QUÉ DEBEMOS IR A LA HUELGA GENERAL

Desde la asociación Movimiento Crítico vamos a apoyar la Huelga General del 14 de Noviembre, y además de movilizar y participar, hemos visto importante escribir algunos de nosotros nuestra opinión, lo que pensamos, y es la respuesta a la pregunta ¿por qué debemos ir a la Huelga General del 14-N? Abajo la respuesta.
Para comenzar solo puedo plantear una pregunta: ¿Qué es lo que nos pasa? Me refiero al pueblo, a la gente del estado español, a la gente que sufre diariamente los ataques del sistema. Siempre tenemos en cuenta lo mismo, desde la transición española el pueblo se ha convertido en algo que no quería conflictos, que sacrificaría cualquier cosa para no volver a infiernos vividos anteriormente en este país. Eso vino de una generación concienciada pero que pensaba que cualquier cosa que viniera sería mejor, la ansiada democracia, la apertura a Europa. La gran mentira desde el primer día, ni transición, ni nada, simplemente una forma de aceptar a los mismos sinvergüenzas en los mismos puestos. Esas generaciones que creían que todo lo que viniera sería mejor ha dado lugar a generaciones de sumisos, que la única cultura que comprenden es el postmodernismo, que prefieren saber quién gano Operación Triunfo o Gran Hermano mil veces antes que saber cómo han reformado la constitución, cómo han recortado en educación, cómo han recortado en sanidad, ¡cómo han recortado en nuestros derechos! ¿No es mil veces más importante? Ese es el único problema que hay realmente en España, que tengamos unos dirigentes que se erigen en reyes, que se erigen en dueños y señores de todos nosotros. Tenemos un presidente del gobierno que publica unos textos diciendo que las clases sociales están decididas por genética, y que si eres pobre te morirás pobre porque, de nacimiento, no te mereces los mismos derechos. ¿Acaso eso no es un insulto a todos los ciudadanos y a todas las personas que conforman una sociedad?
¿Es que no sabemos qué es lo que pasa? En educación lo dijimos, que con Bolonia están intentando privatizar todo lo público, se aprobó en el Tratado de Lisboa en el año 1999, los países europeos firmaron por medio de sus presidentes que había que marcar una hoja de ruta para reducir el gasto público en los servicios públicos, lo que viene a significar que hay que acabar con ellos pasándolos a manos privadas. Eso no es por la crisis, eso no es por una coyuntura temporal, no depende de la prima de riesgo, la única verdad que hay en todo lo que se dice es que depende de “los mercados”. ¿Pero quiénes son los mercados? Esos mercados y sus aliados son los presidentes de los gobiernos que han privatizado empresas públicas y ahora son consejeros de las mismas cobrando grandes cantidades de dinero, el típico ejemplo, Aznar privatizó Endesa, ahora él mismo cobra 200.000€ como consejero de Endesa. No es el único, son muchísimos más de los que decimos. Los miembros dirigentes del PP forman parte todos de FAES (Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales), que no es ni más ni menos que la fundación de Partido Popular para decir burradas fascistoides más indignantes posibles. Fascistas haciendo cosas de fascistas durante su tiempo libre, y vendiendo el futuro de sus vasallos a los capitalistas durante sus horas de trabajo. Y esos tienen nombre, se llaman Emilio Botín y Amancio Ortega, ellos son esos
capitalistas que roban al Estado con el apoyo de sus amigos, la élite política. Amancio Ortega es famoso en Latinoamérica por ser uno de los grandes explotadores que existen, dando trabajo a la población al mismo estilo que los empresarios del S.XIX. Una vergüenza, un enemigo del pueblo, un enemigo del futuro.

Ahora estamos viviendo cosas que son muy duras para la población común, lo que viene a ser el 95% de la ciudadanía. Si eres funcionario y enfermas los tres primeros días pierdes el 50% de tu salario, y si pasa de tres días la rebaja salarial es dramática. Si enfermas, apáñatelas tú solo, porque esos impuestos que pagaste para esos cuidados se los van a llevar los bancos, las cajas y sus directivos. En el mismo caso, si trabajas en la calle, gracias a la Reforma Laboral del gobierno del PP, lo que obtendrás será una clara respuesta por parte del empresario -si enfermas y te vas de baja, no te bajamos el sueldo, simplemente no te molestes en volver y del llamado “finiquito” te olvidas, la ley me ampara- Porque eso es lo que hace la Ley, trabaja al que más tiene, ampara al que lo posee todo. Porque la Ley está hecha para ellos. Y que quede claro, cuando hablamos de empresario no nos referimos a los que les quieren hacer creer que son empresarios, que son las PYMES, esos no son empresarios, son esclavos del Estado explotador, ahora mismo un pequeño empresario tiene más posibilidades de endeudarse por tener un negocio que de ganarse la vida, la subida del IVA es para ellos una condena de muerte, además de que todo lo demás aumenta, y ellos siguen perdiendo. Ellos son los mismos trabajadores que los funcionarios, y que los que trabajan para una gran empresa. Es la misma ruina, es la misma servidumbre.
Por todo esto creo, no lo creo, estoy totalmente convencido de que tenemos que ir a la huelga, pero no ir a la huelga, sino luchar verdaderamente contra esos hijos de puta que nos explotan y nos destruyen. A aquél explotador, a aquél terrateniente urbano que hacen que nuestros padres no puedan enfermar, que hacen que tu matrícula sea tan cara, que hacen que ser felices sea cada vez algo más lejano para todos los que nos lo merecemos, y sobre todo, para aquellos que ya llevan años trabajando y ahora se ven abandonados por culpa de esos fascistas, de esos capitalistas, de esos corruptos.
El año pasado se hicieron piquetes en todos partes y finalmente después de acosar pequeños negocios para que cerraran y respetaran la huelga, se decidió hacer lo propio con Hipercor, que se lo merecen bastante más, ya que son unos explotadores, al final fuimos al Corte Inglés, al mayor explotador de Cádiz. Y ahí estaban los esbirros del sistema, los que comen de su mano y ejercen la “violencia legal” contra los antisistema, esos antidisturbios. Y ahí acabó todo. Para mi ir a la huelga es ir al Corte Inglés y por mucho que el capitalista y sus aliados nos impidan entrar, ir allí y asegurarnos de que bajo ningún concepto abrirán. Lo simbólico es sacar a miles de personas a la calle, pero la verdadera victoria es asegurarnos de que nuestros enemigos conocen nuestra fuerza y no simplemente que somos muchos que paseamos por donde nos permiten. Nuestro enemigo no es el pequeño negocio, nuestro enemigo no es el
tendero, nuestro enemigo es el capitalista, nuestro enemigo es la gran superficie, y ese, es nuestro enemigo.
No somos niños, estamos enfadados, y somos conscientes de quienes son aquellos que coartan nuestra libertad y nuestros derechos. Y sabemos donde atacar ya que nos marcan el sitio con sus perros. Debemos ir allí y demostrar que realmente no vamos a permitir que nos pisoteen, porque ya fuimos esclavos, ya fuimos vasallos, y nunca más lo volveremos a ser.

Jorge Guerrero,
Movimiento Crítico.